Suicidio en tiempos de pandemia
La pandemia Covid 19 a medida que avanza se ha convertido en un problema multifactorial, en estos momentos no solo nos preocupa las afectaciones en la salud física de las personas sino que también es motivo de preocupación la salud mental. Situaciones como el distanciamiento con los seres queridos, la dificultades económicas y la incertidumbre y preocupación por lo que pasara en el futuro son factores que aumentan el riesgo de conductas suicidas.
...Luego de la ideación suicida viene una etapa de la elabóracion de un plan, en este componente persisten las Expresiones de deseos de autoeliminación con algún método específico, lugar y precauciones para lograr no ser descubierto y poder cumplir con su objetivo...
El suicidio se ha convertido en un grave problema de salud pública, que afecta a miles de personas en el mundo y que nosotros no somos ajenos a esta problemática, por esta razón el suicidio requiere nuestra atención, pero desgraciadamente su prevención y control total no son tarea fácil, pero no se pueden escatimar esfuerzos que contribuyan a disminuir el impacto que esta situación genera.
Hay que tener en cuenta que una persona que se suicida en el fondo no quiere morirse, realmente lo que esa persona quiere es terminar con una situación que lo afecta, lo atormenta y le causa mucho sufrimiento, y ven como única opción o como la alternativa más efectiva quitarse la vida. Es por eso que La conducta suicida tiene varios componentes o etapas y es ahí donde todos tenemos que estar alertas para poder actuar a tiempo, los primeros signos que presenta una persona en riesgo de autoeliminación es la ideación suicida, se refiere a pensamientos persistentes que se tienen acerca del deseo de matarse o morirse. En ocasiones lo manifiestan de forma verbal, escrita o a través de imágenes o dibujos estos comportamientos Forma parte del espectro de conductas que perfilan a un comportamiento suicida. El cual comprende además amenazas, cambios de comportamientos, aislamiento, trastornos de sueño (duermen muy poco o en exceso), falta de apetito o aumento del mismo, falta de motivación, descuido en la presentación personal, irritabilidad, llanto repentino sin aparente causa justificable, entre otras.
Luego de la ideación suicida viene una etapa de la elabóracion de un plan, en este componente persisten las Expresiones de deseos de autoeliminación con algún método específico, lugar y precauciones para lograr no ser descubierto y poder cumplir con su objetivo.
Seguidamente se presenta el intento de autoeliminacion, en esta etapa la persona comente el Acto suicida donde muchas veces el resultado no es la muerte pero si deja de manifiesto acciones mediante la cual se causa lesión. Tales como cortarse en diferentes partes del cuerpo, utilizar un método no muy efectivo para matarse, o arrepentimiento al momento de tomar la decisión.
Terminando finalmente por el suicidio consumado. Acto con resultado letal, deliberadamente iniciado y realizado por el sujeto que culmina con la muerte del mismo.
La prevención del suicidio, si bien lo manifestábamos anterior mente en difícil de controlar, es posible prevenirlo si nos mantenemos alertas a las señales de riesgo, actuando de manera oportuna y pertinente, emprendiendo una serie de actividades que van desde la provisión de las mejores condiciones posibles para la educación de jóvenes y niños, consulta a tiempo a un profesional de salud mental, el tratamiento eficaz de trastornos mentales, hasta el control medioambiental de los factores de riesgo.
La mayoría de las personas antes de cometer el acto suicida manifiestan su intención; cuando se detectan estas señales hay que contactar inmediatamente con un profesional en salud mental para que puedan brindar la atención, ayuda y acompañamiento al paciente y a su núcleo familiar, el abordaje de esta problemática requiere de mucha comprensión, amor, dialogo, escucha y acompañamiento por parte de familiares y amigos; los tratamientos constituyen factores muy valiosos para la prevención de la tentativa suicida. El hermoso don de la vida solo está en manos de Dios.
Felipe Ramírez Castillo
Psicólogo, docente, magister en neuropsicología y educación.
piperamirezcastillo@gmail.com
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