Resiliencia en la Adversidad
Felipe Ramírez Castillo
Psicólogo
“Aunque los vientos de la vida soplen fuertes, soy como el junco que se dobla pero siempre sigue en pie, soportare los golpes y jamás me rendiré” este es el mensaje que nos deja la canción resistiré del dúo dinámico.
Mensaje muy acertado para estos momentos de devastación provocados por la fuerza de la naturaleza, y que tiene en graves aprietos a nuestros hermanos colombianos de los departamentos de Antioquia, Norte de Santander, Santander, Cundinamarca, Bolívar, Guajira, Choco, Sucre, Meta, Risaralda, Cauca, Magdalena, además el Archipiélago de San Andrés y Providencia.
Últimamente está de moda la palabra RESILIENCIA, un término que a veces nos confunde y que se nos hace hasta difícil pronunciar, pero en palabras concretas, sencillos y entendibles la resiliencia es la capacidad que tiene el ser humano para hacer frente a las adversidades de la vida, superarlas y salir transformado de ellas.
Un gran ejemplo de resiliencia es el que han demostrado los moradores de estos departamentos que han visto como de un abrir y cerrar de ojos y casi sin darse cuenta, su vida ha cambiado, la naturaleza se ha ensañado en contra de ellos y los ha dejado literalmente como dice el adagio popular “con una mano adelante y otra detrás” ..
Con dolor en el alma por la pérdida de sus seres queridos que un instante fueron arrasados de la faz de la tierra, aniquilados con una fuerza descomunal que solo la madre naturaleza puede infligir, adicional al duelo, la frustración e impotencia que estos sucesos dejan en la vida de las personas, hoy se encuentran a la merced del estado y la solidaridad de sus coterráneos, que han respondido de manera generosa en auxilio de todas las personas damnificadas.
Sus viviendas, cultivos, propiedades todo se ha esfumado, solo queda el deseo, las ganas, la fe y una actitud siempre positiva para salir adelante, reconstruir su terruño y perseverar.
“La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida…”, reza una de las famosas canciones del cantautor y actor panameño Rubén Blades y es tan cierta la frase porque el día a día nos pone obstáculos pequeños y grandes, nos confronta con situaciones peculiares, algunas más traumáticas que otras, que a la mayoría de las personas las tira contra la pared sin saber cómo reaccionar o cómo manejarlas.
“El dolor es inevitable, pero el sufrimiento es opcional”. El dolor forma parte de la vida de los seres humanos, nos guste o no, pero el sufrimiento definitivamente es una elección equivocada que muchas personas toman y los estanca, los aferra al pasado, los convierte en víctima, los lleva a buscar desesperadamente a alguien que los saque de ese sufrimiento, sin tener en cuenta que la solución está dentro de sí mismo.
El tiempo no se va a detener por nadie, el mundo no va a dejar de girar mientras usted aprende a sobrevivir, la vida continua y tenemos que hacerle frente a todas estas dificultades, es decir ser resilientes.
La resiliencia no debe ser mal entendida como la negación de las difíciles experiencias de la vida, dolores y cicatrices, sino como la habilidad para seguir adelante a pesar de ello. Es decir hay que aprender a ser resilientes y comenzar a obtener lo que desea.
Al final de cuentas: “La vida no se hace más fácil o más difícil, usted se hace más fuerte y resilientes a medida que enfrenta las crisis.
