El reino de Dios es como:
El Reino de los Cielos se parece, no al grano de mostaza ni a la levadura sino, al estadio final del proceso: al arbusto y a la masa fermentada. La imagen del árbol es la imagen corriente de un reino poderoso que ofrece protección a sus súbditos. Estudiosos de las tradiciones bíblicas aseguran que los pájaros en la parábola representan a los paganos. Y la masa ( 11,16) es la imagen del pueblo de Dios, conformado finalmente por toda la masa planetaria. (Ver Joachim Jeremías Las Parábolas de Jesús p 166ss).
Justamente el término empleado para decir que los pájaros vienen a anidar en sus ramas, es el que se usa en la biblia para hablar de la incorporación de todos al pueblo de Dios.
La medida de harina es la misma que Abraham en Génesis 18,6 le ordena amasar a Sara para dar de comer a los tres personajes de visita que resultó ser Dios mismo.
Son rasgos que sobrepasan el marco de la realidad: el arbusto de mostaza no es un árbol. Ninguna mujer amasa en casa tres medidas de harina. Todo esto significa la acción salvadora de Dios: De la nada ante los ojos humanos, de los comienzos más miserables, crea Dios su reino poderoso que abarcará los pueblos del universo (o.c. p 168).
Estas parábolas fueron pronunciadas ante las dudas y las mordaces críticas expresadas sobre la misión de Jesús: ese grupo miserable al que pertenecían tantas gentes de mala fama; hombres y mujeres ignorantes, ¿habría de ser la comunidad salvífica nupcial de Dios? Sí, dice Jesús; ella es.
Cuando Pedro lo negaba, Jesús lo veía siendo crucificado posteriormente patas arriba en Roma. Mientras Pablo perseguía a los cristianos ya Jesús lo veía evangelizando a toda Asia y luego siendo decapitado en la Roma de los Mártires.
Las dos parábolas de Lucas 13,18-21 (grano de mostaza convertido en árbol y las tres medidas de harina fermentadas por la levadura), pertenecen al sistema semítico donde se mencionan sólo el comienzo y el fin, quedando en el misterio de Dios el proceso que será indefectible en sus logros. Así aparece tantas veces expresado a lo largo de toda la Sagrada Escritura: Salmo 121,8: “El te guarda al salir y al regresar, ahora y para siempre.” Malaquías 1,11: “Desde donde sale el sol hasta el ocaso, en cambio, todas las naciones me respetan y en todo el mundo se ofrece a mi Nombre tanto el humo del incienso como una ofrenda pura. Porque mi Nombre es grande en las mismas naciones paganas, dice Yavé de los ejércitos.”
Son pues imágenes poderosas contenedoras de las realidades últimas encerradas en el término teológico de Escatología: Lo que sucederá en el último día. El ultimo peldaño para el ingreso pleno al Festín de las Bodas del Cordero. La Parusía. Entre tanto Dios sigue diciendo frente a los cobardes (pues jamás renuncia a la elección inicial de nadie) "indio que huye sirve para otra guerra.”
Hoy, dos días después de una jornada electoral manchada de corrupción, nos habla Dios a través de personas que mantuvieron la cordura y sufragaron movidas por los auténticos valores cívicos de nuestra mancillada democracia. En el pequeño grupo insignificante frente al monstruo feroz y fagocitario del narcotráfico arrasador que aniquila el tejido social, Dios nos dice que el futuro a Él le pertenece. La semilla nace, crece y se vuelve abrigo de todas las aves del Cielo. La señora antes de dormir amasa la harina y descansa serena porque sabe de la infalibilidad del poder fermentativo de la levadura.
Commentaires